Desde que empezó este año, decidí meditar diario, sin importar si estaba en casa o de viaje (que me toca viajar mucho por Nowports)
En la meditación que hacía hoy en la mañana, quería entender por qué me sentía triste o “apachurrado”. Muchas veces queremos creer que por estar de viaje (lejos de casa) vamos a ser más felices (pareciera que a todo lo que aspiramos es a viajar y estar la mayor cantidad de kilómetros fuera de casa).
Con el tiempo y la fortuna de haber podido viajar los últimos años (+182 días viajando en 2022), me he dado cuenta que la felicidad más grande no está en un lugar, en las cosas que compro o en los destinos a los que voy.
Mi felicidad esta en estar bien:
Conmigo mismo
Plenitud familiar y pareja
Misión de vida
Circulo cercano (amigos, mentores, etc.)
La plenitud esta en poder vivir en armonía en estos 4 pilares, que definen tu rutina diaria, la manera en la que atacas cada objetivo, etc.
Con esto no me refiero a que es mejor viajar menos o quedarte en casa, pero en que huir de tu casa (lo que sea que eso significa) no te va llevar a ningún lado si no logras estar en paz contigo mismo.
Real, yo me aventé 9 meses viajando el 2022 y llegué a la misma conclusión. Es un quick fix, pero al final siempre terminas en donde empezaste. Es interesante una vez que te cuestionas porque quieres hacer las cosas. Igual es un proceso que todos tienen que pasar, ya que es imposible llegar a esta conclusión sin haber estado huyendo un rato de tu vida